¿Cómo es posible que de un poco de harina, huevos y azúcar pueda salir un bizcocho? Eso es lo que siempre se ha preguntado Anna, del blog Anna Recetas Fáciles, y la razón por la que la cocina ejerce esa MAGIA sobre ella. Efectivamente, es el encanto de la cocina, ¿te suena? ¡Os dejamos con su entrañable entrevista!
-¿De dónde surge esta pasión por la cocina?
Desde siempre he sentido gran curiosidad por saber cómo de un poco de harina huevos y azúcar se podía sacar un hermoso bizcocho. Me parecía magia y me lo sigue pareciendo. Desde pequeña me gustaba mirar libros de cocina que sólo tenían texto y algún que otro dibujo. Solían llevar ingredientes que no teníamos en casa o que ni tan sólo conocíamos.
Fue cuando me trasladé a vivir a Lleida por temas de estudios que empezó la necesidad de cocinar. Vivía en un piso de estudiantes y, aunque cocinábamos cosas muy básicas, nos apetecía comer platos algo más divertidos. Probábamos a veces a inventar recetas y a improvisar con los pocos medios y el escaso presupuesto que teníamos. A veces salían bien y otras mejor ni hablar, pero siempre tras cada experiencia en la cocina había un aprendizaje. Me di cuenta de que sólo probando una y otra vez se podía llegar a conseguir el resultado deseado.
Siempre me ha gustado leer revistas de cocina y recrearme viendo las bonitas imágenes.
– ¿Cuál es tu plato favorito para combatir el calor?
Los pasteles fríos y la ensaladilla. También me encanta un buen pan con tomate y unas tablas de embutidos caseros y jamón.
– Tienes familia, ¿cuál es el plato preferido de tu marido e hijos?
Mi familia es de comer sencillo y su plato favorito son los filetes de pechuga empanados acompañados de patatas fritas. También les encanta el arroz frito con sus tropezones, el pollo asado, croquetas.. Vamos, son muy poco originales y poco dados a probar platos nuevos.
– Cuéntanos, ¿cuál es tu fruta veraniega preferida?
Sin duda la sandía porque es muy refrescante y saciante. Los melocotones amarillos me encantan y comer una manzana golden madurada en el árbol con su piel algo rosada me parece una maravilla. Eso sí, siempre la como fría de la nevera. Dicen que sabe mejor a temperatura ambiente, pero yo la prefiero bien fría y, sobretodo, crujiente.
– Y ahora una receta fresquita con una de nuestras mermeladas
Me encanta preparar vasitos de yogur con mermelada. Cuando tengo invitados, a veces preparo vasitos con una buena base de mermelada de fresa, frambuesa o frutos rojos, añado yogur griego con o sin azúcar y espolvoreo con unas decoraciones de azúcar, virutas de chocolate o, simplemente unos trocitos de frutas o frutos secos. Con un barquillo o una galletita queda un postre colorido y muy delicioso.
– Imagínate que vas a pasar el día fuera en familia, ¿qué prepararías para todos?
La tortilla de patatas es mi preferida y llevo también una fiambrera con ensalada sin aliñar y la aliñamos justo antes de comer. Nos gusta a todos y con un poco de embutido tenemos una comida riquísima. De postre siempre fruta.
– En tu nevera nunca puede faltar….
Las cosas más básicas: huevos, leche, yogures, fruta de temporada y vegetales para la ensalada y unos cuantos quesos y embutidos.
– ¿Eres más de cuchara o de tenedor?
Soy más de tenedor. Me gustan los platos de cazuela tanto de arroz, carne, pescado… Me encantan las tortillas de lo que sean y las verduras rellenas me parecen maravillosas. Comer con las manos también como la pizza, picoteos, las cocas o un pan con tomate.
– Cuéntanos algún desastre culinario del que todavía sonrías cuando lo recuerdas
Recuerdo uno y todavía me pregunto si fui yo o fue la receta. Había visto unos maravillosos panecillos tipo medias lunas en una revista. Eran doraditos, brillantes y se veían muy tiernos y esponjosos. Guardé esa revista muchisimo tiempo y me dije que un día los iba a probar. Un día los hice con toda mi ilusión. Hice todo lo que decía la receta, no me salté ni un paso, no añadí ni quité ingredientes y cuando vi cómo eran al meterlos en el horno mi ilusión se desvaneció. Quise pensar que eso mejoraría. Esperé a que se doraran y los saqué. Esos tiernos, esponjosos, dorados y brillantes panecillos eran unos discos planos, apelmazados, marrones, mate y duros a rabiar. Los probé y fueron directos a la basura. Me di cuenta enseguida de que quien escribió esa receta no los había preparado.
– Para ti, ¿qué es vida?
La vida es la suma de muchos momentos junto las personas a las que quiero. Disfruto de mi familia, amigos y también de mis aficiones. Trabajo en algo que me resulta muy gratificante y eso me hace ver el trabajo como una diversión. Valoro mucho los detalles y me encantan los regalos que no se compran con dinero. Guardo dibujos de mis hijos y de mis sobrinos y también algún objeto insignificante y de poco valor que me trae buenos recuerdos.