El chocolate es un manjar que gusta a todo el mundo. Apenas hay discusión sobre esto. Ya sea en el momento del postre o la merienda, o como snack, o para celebrar alguna buena ocasión con nuestros seres más queridos y cercanos, se impone como uno de los favoritos. Nos tienta, nos atrapa y nos hace disfrutar. Es, podemos decir, uno de los mayores placeres que existen cuando hablamos de gozar de la comida. Pero, ¿cuánto sabemos acerca de esta maravilla para el paladar?
Existen varias curiosidades alrededor del chocolate. Una tiene que ver, por ejemplo, con su origen. Primero hubo que descubrir el cacao, en el continente americano. El cacao es la planta de la que procede el chocolate mezclando las semillas y la manteca del cacao con azúcar. Viajó desde América Central hasta Europa y después se hizo muy popular en todo el viejo continente. Pero, ¿sabías que la primera forma de tomarlo fue en bebida? Fue poco después cuando se produjo otra de las curiosidades del chocolate. Tuvo lugar en el siglo XVIII. Entonces, el botánico Carlos Linneo lo llamó “Theobroma”, que traducido del griego sería “el alimento de los dioses”. Hasta tal punto había conquistado los paladares de medio mundo.
Después, como decíamos, del cacao ya mezclado con azúcar, nacería el el chocolate con leche y los bombones. Con un sabor más refinado y dulce, el cacao, ya en forma de chocolate, fue consumiéndose cada vez más. Así, el chocolate dejaba atrás su pasado más propio de las clases acomodadas, se universalizó y llegó hasta lo que es hoy.
El chocolate, una delicia para todos
Pero hay más curiosidades sobre este alimento. ¿Sabías que los antiguos mayas y aztecas, en lo que hoy es México, lo usaban como moneda de cambio? Ah, y cuenta la historia que Napoleón Bonaparte llevaba siempre un poco en sus bolsillos. Volviendo al presente, algo que seguramente no conozcas es que, sí: también tiene su Día Internacional. Se celebra cada 13 de septiembre. Quizá ese día no se “debería” celebrar el chocolate blanco, ya que este no es propiamente un chocolate al no contener manteca de cacao.
Los mayores países productores de cacao los encontramos sobre todo en el continente africano, especialmente en su zona occidental. El chocolate, además, produce serotonina, lo que contribuye a elevar nuestros niveles de felicidad. Por eso es tan recomendable darnos un homenaje de vez en cuando con un poco de chocolate. En Helios lo sabemos bien y por eso queremos poner a tu alcance esta delicia.
Y lo hacemos en dos formatos que se harán rápidamente un hueco entre los momentos favoritos de grandes y pequeños. Por un lado, la crema de cacao con avellanas. Un clásico donde los haya para untar en pan recién cortado o tostado, o incluso en galletas o bizcochos. Por otro, el sirope de chocolate o salsa para postres, ideal, por ejemplo, para tus tortitas americanas, helados o un fantástico brownie casero. Con Helios, es más fácil que nunca disfrutar con los tuyos de esta maravilla para compartir felicidad que es el chocolate.