Desayunar pan con tomate es uno de los mayores placeres que existen. Pero, ¿y si te decimos que además es una de las mejores maneras, una de las más saludables, de empezar el día?
Todo lo que necesitas es muy sencillo. Tan solo hazte con un poco de pan recién tostado, también se puede aprovechar el del día anterior. El tomate fresco para untar, que será nuestro ingrediente fundamental. Puedes conseguirlo con el aceite de oliva 100% virgen extra ya incorporado, que le da esa textura sabrosa tan característicamente mediterránea, o sin él y echarle tú mismo un chorrito de ese oro líquido. Un ingrediente optativo es añadir una pizca de sal para potenciar el resultado final.
El tomate, vital para nuestra salud
El tomate es parte de un desayuno saludable debido a sus numerosas propiedades. Es rico en vitaminas A, que protege nuestra vista, B1, B2 y B5, importantes para nuestras células, y las C y E, valiosos antioxidantes. Además de eso, es una fuente de primer nivel para aportar a nuestro cuerpo potasio y magnesio, de gran importancia para nuestros músculos, nervios, huesos y el buen funcionamiento del corazón.
Tiene un buen efecto diurético, por lo que nos ayuda a eliminar líquidos y toxinas. Es de una gran valía también para regular la función intestinal. Además de para nuestra salud, desayunar pan con tomate es especialmente adecuado para dietas de cara a mantenernos ligeros durante los meses de primavera y verano, pues este fruto tiene pocas calorías. Es un alimento, además de sano, muy saciante.
Ah, y si quieres saber un par de curiosidades sobre el tomate, apunta estas sobre sus nombres. Su origen está en la zona de los Andes americanos y fue en México donde se hizo popular entre la civilización azteca. Se llama así por la palabra tomatl, que en lengua náhuatl significa “agua gorda”. Llegaría en el siglo XVI a España e Italia, donde todavía hoy en día se le llama pomodoro. Esa palabra procede de la expresión “pomo d’oro”, es decir, manzana dorada, que es a lo que les recordaba en aquel país y en aquella época este fruto.
Desayunar pan con tomate: una amplia tradición
El aceite de oliva que puede acompañar a este desayuno también tiene muchas ventajas para nuestro organismo. Su ácido oleico es un gran aliado para prevenir enfermedades cardiovasculares. También contiene vitamina E, ayuda a reducir niveles de glucemia y a la absorción de minerales como el calcio, el fósforo o el magnesio. Para facilitarte las cosas, en nuestro pack para untar encontrarás el aceite de oliva 100% virgen extra ya incorporado al tomate.
En cuanto a los tipos de pan, la variedad es tan amplia como nuestra geografía. Puedes optar por el pan de payés típicamente catalán, hogaza, pan integral, barra, baguette, bolla o el popular mollete andaluz. El uso de este desayuno se extiende también por todo el territorio español. Es una tradición que aquí conocemos bien.
Por ejemplo, volviendo si hablamos de Cataluña, es particularmente famoso el conocido como pa amb tomàquet. La primera referencia escrita de esa comida nos lleva hasta el año 1884. En toda nuestra costa mediterránea es también muy consumido. Desayunar pan con tomate es también costumbre en las Islas Baleares, la Comunidad Valenciana o la Región de Murcia.
Y bajando un poquito más, ya en Andalucía, encontramos la clásica media o entera con tomate. En el clásico y esponjoso pan de mollete, ideal para absorber todo el sabor del tomate y el aceite de oliva -y a veces también algo de ajo para quien guste-, su compañero habitual es un buen jamón serrano. Como vemos, empezar el día cuidándonos y disfrutando, es lo más fácil del mundo.