Hoy en día, podemos encontrar dos tendencias, a priori, opuestas entre sí, el Fast Food o comida rápida y el Slow Food o comida cuidada y sin prisa.
Con el nivel de estrés y falta de tiempo que sufrimos cada día a día, muchas personas necesitan recurrir a restaurantes o platos precocinados de comida rápida para no perder ni un segundo extra con algo que puede parecer tan banal pero necesario como comer. Sin embargo, no debemos olvidarnos de que comer, además de ser una necesidad básica, es un placer para los sentidos y, como tal, debemos cuidarlo. Cierto es que la cocina, como todo arte, requiere práctica y las nuevas generaciones, muchas veces no cocinan por falta de tiempo y conocimientos.
En países como Estados Unidos existen estudios de personas que se alimentan únicamente a base de platos precocinados o fast food. Sin embargo, las culturas con mayor esperanza de vida hasta hace pocos años, como eran la japonesa y la española, se caracterizaban por un bajo uso de esta tendencia de fast food y alto índice de comidas en el hogar, tratadas con cariño y en las que se dedica tiempo a charlar con la familia y compartir este momento, algo que beneficia, también, a nuestro corazón.
Este slow food implica sentarnos a comer, degustar, pasar un rato placentero, deleitarse con la comida como relación social, cultivar cuerpo y mente, estómago y alma. Y es un ejercicio que debemos recuperar. Puede que no dispongamos de tiempo, pero basta con empezar a dedicar quince minutos a comer de forma sana y natural y elaborar platos de cuchara para compartir con nuestra pareja o con toda la familia.
Helios ya hace años dio el salto de las mermeladas a ser un fabricante global de productos frutícolas y vegetales. Con la adquisición de Conservas Filito en el último cuarto del siglo pasado comenzamos a incorporar en nuestro portfolio las conservas vegetales de alta calidad en bote de cristal. Puerro, cardo, habitas, judía verde, menestra de verduras, espárragos… Son productos que Dulces y Conservas Helios ofrece en un ready to feet y que permite, dedicando poco tiempo, disfrutar de una comida sana y rica para compartir en una mesa con mantel. Todavía más si unimos estas verduras cocidas con otros productos como nuestras salsas de tomate, reconocidas en el mercado como de alta calidad y elaboradas, algunas de ellas, con ingredientes de máxima calidad como Aceite de Oliva Virgen Extra.
Imagina, por ejemplo, un plato con alcaparras troceadas, nuestro tomate con Aceite de Oliva Virgen Extra, una Menestra de Verduras y, como aporte de proteínas, unos taquitos de jamón. ¡Delicioso! ¿No te apetece probarlo?
Puedes encontrar esta y muchas más recetas dentro del apartado de recetas y videorecetas de nuestra página web.
¡Anímate y qué la falta de tiempo no sea una excusa!